Un paseo en rabelo por los viñedos del Valle del Duero en Portugal/A ride on a rabelo among the vineyards of Portugal’s Douro Valley
Seguro que habéis oído hablar del vino de Oporto, pero una curiosidad que tal vez no sepáis es la historia de dónde se produce, porque dejadme que os cuente algo, el vino de Oporto no viene de Oporto. Sí se almacena frente a esta ciudad, al otro lado del Duero, en las bodegas que hay en Vila Nova de Gaia. Aquí es donde este preciado caldo aprovecha el frío clima para madurar. Pero las viñas de las que proviene se encuentran lejos, en el Valle del Duero portugués, que se extiende a orillas del río del mismo nombre, entre Oporto y la frontera de Portugal con España. La distancia entre lugar de producción y de almacenamiento se salvaba tradicionalmente en rabelo, una típica embarcación que en las ilustraciones antiguas veréis casi siempre cargada de toneles y que hoy disfrutan los turistas. Por eso y porque los paisajes de la zona prometían ser preciosos, este verano, antes de dirigirnos a Oporto, decidimos pasar unos días en el Valle del Duero portugués, en una quinta perdida entre viñedos cerca de Pinhao, que merece un post aparte. En esta región hay un microclima particular, muy distinto al de Oporto, que se caracteriza por el calor, que garantiza el azúcar de la uva y la vegetación, que proporciona la humedad necesaria a la misma.
Aquí las viñas se plantan en terraza, muchas de ellas protegidas por antiguos muros de piedra y cubren las orillas del Duero hasta casi tocar el cielo, formando un paisaje espectacular. En un próximo post os llevaré sin falta a Vila Nova de Gaia, para que conozcáis la preciosa bodega que visitamos allí, pero de momento os dejo con una experiencia imprescindible en el Valle del Duero portugués: el paseo en rabelo por el río, cerca de Pinhao. Seguro que casi podéis apreciar el sonido del agua al abrirse paso la embarcación, la suavidad de la brisa, el olor a río, la emoción al encontrarnos con otros barcos y con idílicas propiedades en la orilla y el potente e inconfundible sabor del vino que nos dan a probar en una copita, antes de regresar al embarcadero y despedirnos de una agradable mañana de navegación.
Datos prácticos
Nosotros hicimos este inolvidable paseo en rabelo por el Duero con la empresa Magnifico Douro. Dos horas estupendas que cuestan 20 euros/persona. La aventura comienza en Pinhao, frente al Hotel Vintage, que por cierto, si tenéis tiempo, merece una visita rápida de sus zonas comunes. Os dejo la web de la empresa con la info del paseo que hicimos aquí. Proponen también otros paseos y actividades. Su cuenta de Facebook está en este link.
¡Muy buen jueves y fin de semana!
|Harmonyanddesign| dijo,
noviembre 7, 2013 @ 3:36 pm
Wow pero qué maravilla de lugares y yo sin vacaciones todavía.
Besos
chus dijo,
noviembre 7, 2013 @ 7:54 pm
Me encanta el «vinillo» de Oporto y el paseo parece muy agradable, teniendo en
cuenta que nos queda aquí al lado habrá que seguir tus consejos y dar una vuelta por ahí.
Bss,
Helena dijo,
noviembre 9, 2013 @ 12:50 pm
Cómo me gusta Portugal!!, tengo unas ganas de volver tremendas.
Oporto Y Vila Nova me encantan, pero reconozco que este vino no es mi preferido…
Begoña dijo,
noviembre 11, 2013 @ 6:06 pm
Que paseo más agradable, a mi me gusta mucho el vino de Oporto, está riquísimo.